En la entrevista es la pureza de Adele lo que más me ha llado la atención. Para empezar, a esta chica londinense, el éxito le ha pillado éxito por sorpresa.
Tanto que puede tener problemas con el fisco porque sus cuentas están pasadas. Aunque asegura que se mantendrá firme ante la invasión de una marca de publicidad con su nombre.
Dice que ha recibido una oferta millonaria para ser la imagen de la Coca-Cola Diet y ha rechazado la tentación.
Asegura que le han hecho ofertas millonarias para actuar este verano en Festivales de música y las ha rechazado todas, porque la pureza de su voz, de su música no da para una multitud de más cien mil personas. Incluso detesta los Palacios de Deportes.
No quiere prostituir su nombre, su música y voz.
Me parece maravilloso. Es una virgen de la pureza. Pero, claro, sólo tiene 22 años y todavía cree en los angelitos. Ya veremos.
Adele se niega a escribir más canciones que estén inspiradas en su ex novio, pues considera que no se lo merece. La cantante británica, que escribió Someone Like Yo inspirado en su dolorosa ruptura, ha admitido que su ex novio no será más motivo de inspiración para la creación de nuevas canciones por ser un "idiota".
Adele, que terminó la relación con su ex novio en mayo, confiesa que no tiene planes para cantar su dolor en su próximo disco, pues su ex novio estaría encantado. "Yo sé que él estaría en la luna si yo escribiese una canción sobre él, pero de ninguna manera lo conseguirá", dijo Adele en una entrevista con Jonathan Ross.
Adele también habló de cómo es estar soltera y del mal rato que pasó tras romper con su ex. "Odio estar soltera. Realmente es muy difícil y para ser sincera, me sentí como quemada por dentro en mayo cuando terminamos", y añadió "tenemos los mismos amigos y todos ellos estarán viendo esta entrevista, y todos ellos le estarán diciendo, 'perdedor'"
Puede ser que esta también sea una estrategia para protegerse, pues en mayo la cantante reveló que su ex novio -quien fue su fuente de inspiración por su álbum '19'- quería obtener beneficios financieros sobre las canciones de la artista.
"Me estuvo llamado por una semana y realmente hablaba muy serio al respecto de obtener beneficios de mis canciones. Finalmente, le dije, 'bueno, hiciste mi vida un infierno, así lo he vivido y ahora me lo merezco'", explicó.
Adele ha vuelto a contar que vomita antes de cada concierto. Y que cuanto más vomita, mejor le sale el show. Pero es por nervios, no por obsesión con el cuerpo, de eso reconoce que pasa olímpicamente. Confesiones en una entrevista en el Vogue británico de octubre que, además, no está exenta de polémica. Empieza a haber un run-run considerable por el hecho de que a Adele sólo se le saquen primeros planos en las forografías de las revistas, nada de imágenes de cuerpo entero.
Lo cierto es que en esta entrevista Adele, pese a todo, reconoce que al igual que el común de los mortales tiene “inseguridades” con su cuerpo, pero que, sencillamente, no suele “andar con gente que se las recuerda”. De la obsesión que tiene tanta gente por ser más delgada o tener más pecho, ella considera que es agotador. Y no quiere eso en su vida.
De todas formas, no piensa echarse pareja por ahora, momento en el que su fama crece exponencialmente, copa las listas de éxitos y ya se la declara sin temor a exagerar como la heredera de Amy Winehouse, obviamente, en un sentido estrictamente musical. El caso es que, de pretendientes, nada:
“Me distraigo tanto cuando tengo a alguien en mi vida, que no me puedo permitir el lujo ahora de estar con nadie. Además, nadie me trata mejor que yo.”
Adele también afirma solemnemente que le gusta ser ella, tal y como es. Y ojo, todo este alarde de personalidad no es un brindis al sol. Dice claramente que no tiene interés en ser imagen comercial de nada. Y de serlo, como no se trate de una “Full-fat coke” (Coca-Cola bien engordante), nada, bromea.
Imagenes; Qmagazine