La miel ha sido siempre un tratamiento natural para el cuidado del cuerpo desde que los egipcios descubrieran sus propiedades curativas en heridas y otros males de la piel. El tiempo y la ciencia nos han revelado que tiene propiedades antibacterianas, lo que explica su capacidad curativa.
Este es un baño tan sencillo de preparar como maravilloso de disfrutar. Combina las propiedades curativas de la miel y el vinagre de manzana (que también es antifúngico), con el la habilidad del ácido del limón para atacar las células muertas. Antes de comenzar, conviene recordar que debemos tener las uñas limpias y bien cortadas.
Esto es lo que necesitamos:
1/2 Taza de miel
2 cucharadas soperas de vinagre de manzana
1 limon en rodajas (guardamos una para el gin-tonic que nos beberemos mientras disfrutamos del baño)
Un cubo
El proceso es como sigue:
Llenamos el cubo de agua caliente
Añadimos la miel y el vinagre, removiendo enérgicamente hasta que se mezclen bien
Colocamos las rodajas de limón
Sumergimos los pies durante unos 20 minutos.